Salsola genistoides
Familia: Chenopodiaceae
Fotografía tomada en cabo de Palos, en diciembre de 2011.
Pequeño arbusto de hasta 2 m, con raíces principales gruesas y profundas, que se continúan en una enmarañada red de pequeñas raicillas sucesivamente muy ramificadas y divididas, de color blanco-amarillento. Tallos delgados, estriados, pardos o prácticamente negros, intrincados, los jóvenes verdes, desarrollándose en el extremo de los anteriores, con hojas, lineares, cortas, de 0,5-1 cm de longitud. Inflorescencia espiciforme, de flores en densos y largos grupos al final de las ramillas. Flor poco vistosa, hermafrodita, de simetría pentámera, en la que no se diferencia cáliz ni corola, sólo cinco piezas (tépalos), entre los que se encuentran los cinco estambres, el órgano más desarrollado y claramente reconocible. Durante la formación de los frutos, los tépalos continúan creciendo, y se desarrolla un ala subcircular membranosa de color llamativo, en la gama del rosado-purpúreo, de intensidad variable y en ocasiones hasta blanquecino-verdosa.
Florece de mayo a diciembre.
Es una planta exclusiva del sureste ibérico, localizada en las provincias de Almería, Murcia y Alicante.
Es una especie muy bien adaptada a condiciones extremas. Se secan en el verano y pierden todas sus hojas, rebrotan tras las primeras lluvias y presentan gran colorido a mediados de noviembre tras la floración.
La escobilla se ha utilizado para realizar escobas muy rudimentarias. En la actualidad, sus ramas se emplean con frecuencia para barrer los higos chumbos.